Muhammad Alí dijo una vez, servir al otro es pagar el arriendo por el espacio que tenemos en el mundo, este es uno de los pilares de Claudia Martínez Patiño, egresada de Zootecnia, con estudios en Negocios Internacionales, en filantropía, en Gerencia de ONG´s, en Administración en Organizaciones sin ánimo de lucro, con un interés profundo en voluntariados, que surgió tal vez por su formación cristiana, pues recuerda ser misionera desde los seis años. Ella actualmente vive en Chicago, “aportando a la siguiente generación”, como lo afirma.

Desde la Universidad se emocionaba al escuchar a otros cuando narraban sus aventuras de voluntariado, fue el tiempo, la curiosidad y la atracción que le genera ayudar a otros, lo que le permitió unir sus estudios con lo que siempre soñó, “son diferentes cuando piensas que Zootecnia solamente es trabajar en el campo, en una finca, en una planta de alimentos o con los animales como tal y cuando piensas en negocios internacionales, pero resulta que se juntan ahí donde les encontré la unión, en nutrición animal, en la importación y exportación y luego sin ánimo de lucro, hay un montón de fundaciones que están relacionadas y que hacemos trabajo agropecuario y de relacionarnos con las personas que ejecutan esos trabajos del campo (…) tener una formación tan práctica como lo fue mi formación en Zootecnia en la UNAL Medellín me ha hecho más resiliente, más investigadora, todas las áreas y mentores que tuve en la Universidad Nacional desarrollaron realmente la persona que soy”, así lo expresó la Zootecnista.

“Me apasiona inmensamente invertir en la siguiente generación”, lo replicó, por eso algunas horas del día las dedica en la Universidad donde realizó una de sus maestrías, y trabaja tiempo completo para una organización sin ánimo de lucro de socorro humanitario, basada en Estados Unidos con operación en diferente países del mundo; ella coordina América Latina, El Caribe y una parte de Estados Unidos.

Claudia afirma contundentemente que no tener dinero “es la excusa más mentirosa de todas y que nos hace mediocres a pensar en que no se puede”, pues, viajó a Chicago, ciudad de los vientos, de la que siempre ha estado enamorada a estudiar inglés, luego quiso quedarse y se presentó a diferentes becas y universidades y hoy dice orgullosa que pudo realizar su segunda y tercer maestría, en una lengua que no era la suya y en un lugar donde ser mujer y latina no es muy apropiado.

En su corazón tiene a México, Finlandia y Turquía, por sus experiencias como voluntaria, pero su “alma es palestina”, la egresada afirma que cada lugar tiene su magia, le recuerda su origen, además, cuando viaja a cada lugar abre las puertas para recibir, “uno es prácticamente el que recibe todo y le cambia la vida, es bien fascinante. Yo todavía no me canso de sentir esa experiencia cada vez que puedo (…) nos abre la puerta a ser resilientes, nos fortalece el carácter, nos hace apreciar cosas, valorarlas, creo que simplemente es una oportunidad para ser reciproco en la vida”, lo reiteró.

Escucha la vida e historias de la egresada el próximo lunes 6 de julio de 2020 en el programa radial Egresados UNAL por 100.4 fm Radio UNAL o http://unradio.unal.edu.co/.