Jorge Luis es un ingeniero agrónomo con una trayectoria profesional inspiradora. Su historia refleja cómo una casualidad lo llevó a descubrir su verdadera pasión en la ingeniería agronómica y cómo esta profesión se ha convertido en mucho más que un trabajo, en una experiencia de vida enriquecedora.
Desde sus orígenes en una familia de finqueros, Jorge Luis siempre estuvo cerca del campo y de la agricultura. Sin embargo, su camino hacia la ingeniería agronómica no fue directo. Inicialmente, su primera opción de profesión estaba en ingeniería eléctrica, pero al tener la oportunidad de elegir su segunda opción, optó por la agronomía. Esta decisión, aparentemente fortuita, marcó el comienzo de una carrera que lo llevaría a encontrar su verdadera vocación.
Durante sus primeras clases de introducción a la ingeniería agronómica, Jorge Luis encontró una conexión profunda con el trabajo de las personas que están en el campo, dedicadas a procesar alimentos y enfrentar diversas dificultades a diario. Esta experiencia fue transformadora y lo llevó a enamorarse de su profesión y a sentir que finalmente había encontrado su lugar en el mundo.
Una de las motivaciones más grandes de Jorge Luis para estudiar ingeniería agronómica fue la oportunidad de llevar todo su conocimiento y experiencia al lugar de su nacimiento, para potenciar el potencial agrícola de los municipios de Caribe seco de la subregión Sabana del departamento de Sucre y Bolívar, que consideraba estancados. Para él, graduarse no era solo obtener un título, sino una oportunidad de crecimiento personal y profesional, y una manera de contribuir al desarrollo de su comunidad.
La historia de Jorge Luis nos enseña que a veces, las decisiones más importantes de nuestra vida pueden surgir de manera inesperada, pero que cuando seguimos nuestra pasión y trabajamos por un propósito mayor, podemos lograr cosas increíbles y dejar un impacto positivo en nuestro entorno.