“Yo me defino como una persona que disfruta el saber, no en la vanidad del título, sino el gusto, alguien que aprendió a amar el libro por el sistema educativo en el que tuve la oportunidad de estudiar(…) si sabemos podemos cambiar, si conocemos podemos transformar”, así se describió el historiador Ramón Arturo Maya, magíster en Estudios Políticos, candidato a doctor en Filosofía y actual Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Pontificia Bolivariana.

Su mamá, al parecer, es el eje principal de lo que el historiador ha sido y es, porque gracias a ella no ha perdido su esencia, la capacidad de escucha, no para refutar, sino para comprender; “cuando la mamá lo logra transmitir, entonces el sistema lo que hace es potenciarlo, entonces en el fondo yo soy el mismo gracias a esa mamá, de cuando estaba estudiando Historia, cuando fui profesor de colegio, cuando me convierto en decano”, así lo afirmó el egresado; la UNAL Sede Medellín, también hizo parte de ese “sistema educativo”, espacio en el que se formó, conoció su actual esposa y al que le debe el amor por la docencia.

Como él lo afirma, la historia está llena de azares y tal vez eso es lo que la hace bella; después de probar un sin número de profesiones incluso pensar en ser clérigo, se resolvió por la Historia y con esta, encontró parte de su proyecto de vida, “yo conocí a Claudia en el primer semestre de la carrera de historia, en la primera clase, recuerdo que la recibíamos en el viejo bloque 21, y ahí empezó una relación, hemos estado juntos toda la vida, luego nos vinculamos a la Universidad Pontificia Bolivariana en unos 22 o 23 años, para ambos ha sido determinante la relación con la Universidad Nacional, la formación en la Universidad Nacional en la carrera de Historia, lo imprimió en nosotros”, así lo manifestó.

Ama su profesión porque según él, la Historia es el programa con más pertinencia en Colombia, porque es preciso conocer el pasado, para entender el presente y proyectar el futuro con mayor precisión, “yo me atrevería a afirmar, que el tiempo que le preocupa a la historia no es el pasado, es el presente, entonces el país lo necesita, hay unos asuntos que podríamos nosotros resolver, acordando, exorcizando nuestro pasado, entendiéndonos, y cuando nos entendemos va a ser mucho más fácil poder dialogar en este presente”.

Entender e interpretar ese espejo retrovisor como él le dice a la historia, es la herramienta de las nuevas generaciones, “yo le recomendaría al ingeniero, ¿quiere ser mejor persona?, la historia, al médico ¿quiere ser más sensible?, la historia, al político, deberíamos poner al político a leer historia para que tenga sensibilidad social y eso nos ayudaría muchísimo”.

El egresado Ramón Maya estará en el programa radial Egresados UNAL., escuche la primera parte el lunes 10 de septiembre y la segunda parte el lunes 17 de septiembre.