Con un acto de posesión, la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín oficializó el nombramiento de Soreyi María Barrero Castañeda como directora de la Escuela UNAL. La ceremonia representa la renovación del compromiso de la Institución y la funcionaria con la educación y la construcción colectiva de conocimiento desde la infancia.
Soreyi María Barrero Castañeda, licenciada y especialista en Pedagogía, tomó juramento como directora de la Escuela UNAL este miércoles 3 de diciembre de 2025. Con esta ceremonia, la Institución oficializa y ratifica nuevamente a la funcionaria quien desde el año 2013 ejerce como apoyo en la Dirección Administrativa y Pedagógica de la misma.
“Soreyi hace muchos años pertenece a esta comunidad universitaria, solo que hoy haremos ese reconocimiento al cargo que había ejercido siendo necesario que este se formalizara. Lo que estamos haciendo es reconocer el trabajo que ha tenido en la Escuela, el liderazgo y la pedagogía. Es un gesto que toda la comunidad universitaria le debe por este ejercicio tan bonito, este es el eco de muchas personas que han reconocido el trabajo de Soreyi” expresó la vicerrectora de la Sede, Mary Luz Alzate Zuluaga.
Durante el acto de posesión, la directora recibió dos símbolos de la identidad universitaria. En primer lugar, el escudo de la Universidad, que representa la tradición académica y la memoria institucional. Además, se le hizo entrega del Compromiso Ético, documento que simboliza la convicción de que el trabajo universitario debe dejar huella en los territorios y transformar vidas.
En señal de adhesión a estos principios, la directora Soreyi Barrero realizó la lectura en voz alta del compromiso, ratificando su voluntad de actuar con sensibilidad humana y rectitud.
“Solo tengo agradecimientos para las personas que han acompañado mi ejercicio profesional en la Escuela, no ha sido fácil por las complejidades que trae, pero que ha logrado salir adelante por el amor que le tenemos a los niños y a ese proyecto educativo. Apostarle a una Escuela es apostar también a la Universidad, son esos niños los que luego ingresarán a la Universidad. Es un proyecto diferente, pensado para cuidar y apoyar a las familias que transitan este campus. Hoy tenemos familias egresadas que están llevando a sus hijos a la Escuela y esa es la mejor forma de validar que este proyecto es importante, que confíen la educación de sus hijos en nosotros”, expresó Soreyi María Barrero Castañeda durante el encuentro.
Hace 46 años (1979), la Escuela nació como una iniciativa entre la Universidad Nacional y organizaciones sindicales, en las sedes Medellín, Palmira y Bogotá. El modelo inicial de operación fue una réplica de los hogares infantiles del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). Actualmente, la Escuela de la Sede Medellín cuenta con los niveles de Prejardín, Jardín, Transición y Básica Primaria de 1° a 5°. Es una institución educativa de naturaleza oficial y de carácter especial con un enfoque en el desarrollo holístico del ser y el aprendizaje lúdico.
La Escuela de la UNAL Sede Medellín atraviesa una nueva etapa con la modificación del Acuerdo 03 que brinda la posibilidad de que ingresen estudiantes con otros vínculos a la Universidad. Lo anterior, con el objetivo de fortalecer la cobertura de la misma y ampliar la red de apoyo admitiendo a hijos de egresados y a hermanos, primos, sobrinos y nietos del personal vinculado con la Universidad.
“En el último año se han dado procesos de fortalecimiento muy importantes, la creación de los nuevos cargos no solamente de la Dirección de la Escuela que estaba en cabeza de la Dirección de Bienestar Universitario, sino también nuevas plazas para profesores allí. También el acuerdo que permite el ingreso de nuevos vínculos en la Escuela, lo que contribuye a la sostenibilidad de este proyecto educativo, además de todos los procesos administrativos externos que tienen que ver con la licencia de funcionamiento y el carácter especial de la Escuela”, señaló la Directora de Bienestar Universitario, Cristina Echeverri Pineda.
“La Escuelita” como es conocida entre los miembros de la comunidad universitaria, actualmente tiene una capacidad instalada para 200 niños, con 20 niños por aula para preescolar y 25 alumnos por aula en básica primaria. Según las proyecciones, serán 20 cupos nuevos para estudiantes en el 2026 y la integración de dos nuevos profesores a la nómina. Actualmente la Escuela UNAL Medellín tiene abiertas las inscripciones.
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Sobre los retos y proyecciones para el futuro, la directora Soreyi enfatiza que es fundamental trabajar por la calidad académica de la misma. “Afianzar el nivel de preescolar y la primaria para consolidar la básica secundaria y presentar un proyecto unificado y de calidad, con el fin de proponerle a la comunidad educativa la continuidad del ciclo académico hasta la secundaria, que es lo que anhelan los padres de familia que llegan a la Escuela”.
De acuerdo con la funcionaria, este año también se logró la actualización de las licencias y la legalización de todo el nivel de preescolar: prejardín, jardín y transición. “Eran grados que no estaban incluidos en la licencia de la Escuela, otorgada en 1982, y que estaba pendiente por renovación hasta nueva visita por parte de las entidades del Ministerio de Educación. Tuvimos, además, el reconocimiento del lugar y la infraestructura como un sitio con las condiciones técnicas adecuadas para prestar el servicio educativo”, agregó Barrero Castañeda.
Adicionalmente, las directivas trabajan en la consolidación de la Escuela para posicionarla en el Distrito de Ciencia, Tecnología e Innovación de Medellín como una institución educativa de carácter especial, lo que implica una serie de acciones administrativas y legales.
Con esta posesión, la Universidad Nacional Sede Medellín busca asegurar una gestión pública eficiente, confiando en que la experiencia y el liderazgo de Barrero Castañeda son piezas clave para una etapa institucional orientada a inspirar y trascender desde la Escuela UNAL.
(FIN/JRDP)
2 de diciembre de 2025



