Tres egresados hablaron recientemente sobre sus experiencias como emprendedores con proyectos que se gestaron mientras estudiaban sus pregrados en la UNAL Medellín. Durante la Semana de la Extensión 2025, ellos, quienes articularon el conocimiento con la creación de empresa, destacaron las ventajas y los retos de estas apuestas.
Desarrollar la resiliencia y habilidades transversales son aspectos fundamentales para hacerse emprendedor, según Luis Miguel González Gutiérrez, ingeniero mecánico de la UNAL Medellín, cofundador y gerente de Tecde, una empresa que mediante inteligencia artificial y datos trabaja en el crecimiento de empresas. Para él, hacer empresa, además de traer ventajas, implica aprendizajes y cambios de perspectiva.
Adquirir confianza en sí mismos es uno de los principales retos, cuenta Eduardo Ospina, cofundador y gerente de Energy, quien se formó como ingeniero electricista de la Sede, mientras relataba su anécdota de cuando participó en un concurso de embarcaciones, al que él y un grupo de compañeros fueron sin la mentalidad de ganar, solo de participar y, aun así, triunfaron. Por fortuna, destaca, durante el pregrado tuvieron docentes quienes fueron determinantes en impulsarlos, como los que guiaron el proceso en Hydrómetra, un grupo de trabajo articulado con un semillero enfocado en la creación de soluciones de movilidad sostenible para los sectores naval y automotor.
Los aprendizajes que se dan en el camino del emprendimiento son muchos y así lo demuestra la experiencia de los egresados con sus empresas. Una de las recomendaciones de González Gutiérrez es no enamorarse del producto que se vende, pues más allá del interés por la calidad de los productos o de las soluciones que aportan, “tenemos que ajustarnos al mercado”, dice.
Así como esto es relevante, lo son las alianzas, las colaboraciones con otros emprendedores o inversionistas igual de apasionados que promueven el tomar riesgos, que es una constante cuando se está en el mundo de los negocios. En ese sentido, Ospina considera como aliado cultivar la intuición e, incluso, aprender a decir “no” cuando sea necesario o cuando se sienta que algo no está bien. Para él, lo importante no es solo el monto de capital, sino también “el feeling, entender lo que sentís y tomar decisiones con respecto a eso”.
Darle valor a la formación y al conocimiento es loable, de acuerdo con el ingeniero mecánico Pablo Andrés Pantoja González, cofundador y gerente de Runny, una apuesta para acelerar la transición energética hacia la movilidad eléctrica con foco en domicilios de última milla. Se refirió a que el entorno del emprendimiento, por lo general en las universidades públicas, se ve como “algo alejado”.
Las reflexiones de los emprendedores se dieron durante el conversatorio “Startups de impacto: historias de éxito de egresados UNAL que convirtieron el emprendimiento en su propósito de vida”, que se realizó durante la Semana de la Extensión 2025. Según Lida Isabel Tamayo, jefa de la Unidad de Gestión Tecnológica de la Sede, la intención del espacio fue promover el emprendimiento desde algunas experiencias exitosas y entregar recomendaciones a quienes se interesen en llevar adelante iniciativas de emprendimiento.
(FIN/KGG)
1 de julio de 2025