Desde las épicas sagas de superhéroes hasta las novelas gráficas que cuentan fragmentos de la historia colombiana y latinoamericana, los 336 volúmenes de historietas que alberga la recién inaugurada Sala del Cómic, abren un nuevo capítulo en el mundo de la lectura en la UNAL Medellín, para expandir los horizontes literarios y el fomento de nuevas formas de conocimiento. La apertura del espacio estuvo acompañada de la conferencia “¡Exijo una explicación! Pepo y el humor gráfico como fuente de estudio histórico” como parte de la presentación del libro en honor al creador de Condorito.
Reconociendo el cómic como una poderosa forma de expresión cultural y narrativa histórica, la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín abrió su nueva Sala del Cómic, un lugar lleno de aventuras, misterios y personajes, donde la comunidad universitaria podrá explorar los mundos del papel y la tinta de una manera diferente.
A esta colección de material gráfico, conformado por 336 volúmenes de cómics, se sumó el libro Cartas para Pepo: Intimidad, género y clase (Chile, siglo XX). Emociones y espacio en la vida del dibujante René Ríos Boettiger, cuya autora, Claudia Stern Westermeier, participó del acto inaugural.
“Quiero expresar mi profundo agradecimiento a la Universidad y a la Biblioteca Efe Gómez por invitarme y darme el honor de inaugurar la Sala del Cómic, un espacio convocante, precioso y necesario para nuestras universidades, que refleja la sintonía que tiene este Campus con sus estudiantes, profesores y quienes trabajan acá. Me siento muy honrada de presentar un libro sobre Condorito en un lugar donde Pepo y Condorito dejaron una profunda huella”, destacó la escritora chilena.
La doctora en Historia enfatizó que el humor gráfico ha cumplido un rol de información como una forma de periodismo con una gran relevancia en la sociedad.
“Si nos remitimos a la primera página de la prensa escrita, la viñeta es un reflejo simple y agudo de las coyunturas del momento que sigue teniendo la misma centralidad que tenía de antaño. El humor gráfico en todas sus expresiones ha cumplido un rol social que no podemos dejar de lado, por eso, la centralidad del estudio y la investigación de las historietas es fundamental debido a que son otras formas que nos permiten revisitar nuestra historia. Son fieles retratos de lo que estaba ocurriendo en nuestros países en ese entonces”, comentó Claudia Stern, profesora de la Ca' Foscari University of Venice, en Italia.
La Sala del Cómic es producto del trabajo articulado entre el Sistema de Bibliotecas de la Sede, la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas y la Dirección de Investigación y Extensión.
“Estamos en una biblioteca singular que ha sabido resistir y mantenerse en medio de un momento muy difícil para el libro y las bibliotecas. Para que esto sea así debemos imaginar nuevos puentes, objetos y posibilidades. La existencia del curso Historia y Cómic y muchos otros espacios que se han abierto recientemente en la Universidad y en Colombia hablan de esa búsqueda, de no conformarnos con el formato del libro y sus contenidos textuales, sino que experimentemos. Y esa búsqueda no se limita al cómic, aunque aquí el cómic es el protagonista, sino que se comporta como invitación a descubrir nuevas maneras de comunicar, pensar, crear, que le den vida desde la Universidad a lo bello”, señaló el decano de la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas, Óscar Calvo Isaza.
Por su parte, el docente del curso Historia y Cómic, Mario Casas, indicó que el espacio es producto de meses de trabajo articulado entre diversos actores. “Esta Sala se viene pensando hace muchos meses. Esto nos abre posibilidades para que cada estudiante de esta Universidad pueda visitar, usar, descubrir y tener oportunidades”.
En el primer piso de la Biblioteca Efe Gómez del Campus El Volador, los amantes del cómic y visitantes encontrarán un lugar inspirador ambientado con arte y pufs para disfrutar de la lectura de una forma cómoda y amena.
“Este espacio es muy interesante porque nos invita a conocer más sobre los cómics que me parecen muy atractivos porque no es una lectura normal, la novela gráfica te da una perspectiva muy interesante”, expresó Alejandra Villa, estudiante de Artes Plásticas, durante la apertura.
Sobre las Cartas para Pepo
Durante la conversación con la comunidad universitaria asistente al evento, la escritora de Cartas para Pepo: Intimidad, género y clase (Chile, siglo XX). Emociones y espacio en la vida del dibujante René Ríos Boettiger', contó que una de las particularidades del libro es que además de enfocarse en Condorito, pone de relieve la trayectoria de Pepo como artista multifacético con un humor muy agudo y trazos que muestran su calidad como dibujante.
“Tuve acceso al epistolario de Pepo a través de la Biblioteca Nacional de Chile, son 42 cartas que se suman gracias a la generosidad de un coleccionista privado, las que estimamos son las últimas cuatro cartas de Pepo en vida. Cada carta está examinada en calidad de documento histórico, citada a través de extractos y así se construye la historia del libro a través de tres dimensiones: la intimidad y las emociones, las relaciones de género y clase y la vida cotidiana y el espacio” detalló Claudia Stern.
Éstas 46 cartas escritas entre los años 1935 y 2000, permitieron a la historiadora “escarbar” en la trayectoria de Pepo desde sus inicios, a medida que fue adquiriendo conciencia de sus capacidades como dibujante, cuando empezó a ganarse la vida en este oficio, hasta que culminó su carrera artística.
“Por otra parte, a través del contenido de estas cartas, pude reconstruir la historia de Chile durante el siglo XX. El nivel de información que emana de cada epístola es digno para escribir como cinco libros más, porque son un fiel retrato de cómo repercutían los aconteceres, proyectos de ley, desastres naturales como el terremoto de 1939, la Segunda Guerra Mundial, huelgas, elecciones presidenciales y otros hechos históricos en la vida de las personas y la manera como fue evolucionando el país”, agregó la historiadora chilena y profesora universitaria.
Con una dedicatoria hecha a mano, la autora del libro, Claudia Stern Westermeier, marcó el ejemplar que donó a la nueva Sala del Cómic, material que se suma a esta colección de viñetas y que podrá ser disfrutado por propios y visitantes.
(FIN/JRDP)
22 de mayo de 2025