El reconocimiento es válido inicialmente para tres años. Durante ese lapso el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (Minciencias) podrá hacer seguimiento al desempeño y agendará visitas en pro de su calidad. De esta manera se continúan abriendo las puertas para el fortalecimiento de la divulgación de la ciencia desde la UNAL Medellín, en este caso con base en insectos.

La vocación fundamental del Museo Entomológico Francisco Luis Gallego (MELFG) de la Facultad de Ciencias de la UNAL Medellín es salvaguardar la biodiversidad de insectos, sobre todo de las especies de importancia económica y con impacto en la producción agrícola. No obstante, desde hace algunos años también se destaca el trabajo con aquellas que son de interés desde otras perspectivas como la prestación de servicios ecosistémicos, bioprospección y biotecnología.

“Desde siempre ha tenido entre sus actividades importantes proyectar a la sociedad el conocimiento y la producción científica de estudiantes y docentes”, dice Sandra Uribe Soto, profesora del Departamento de Biociencias de la Facultad de Ciencias de la UNAL Medellín y coordinadora del Museo Entomológico Francisco Luis Gallego.

Además de contar con muestras científicas en una colección taxonómica central, el Museo tienen otras que son didácticas y que habían estado dispuestas, inicialmente, para la enseñanza en programas de pregrado y posgrado de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Sede, principalmente, pero que ahora se amplían a públicos más diversos.

Recientemente lo que hizo Minciencias, cuenta la docente, fue propiciar que los museos sean considerados como espacios mixtos, cuyo propósito además de la investigación, la docencia y el cuidado de las colecciones científicas es la apropiación social de la ciencia y la tecnología, una tarea transformadora en la que espera continuar la UNAL Medellín, pues la idea es usar la información que ya existe, pero también generar una nueva para que el trabajo sea más dinámico, y “para que la ciencia empiece a desempeñar papeles diferentes e importantes en la sociedad”.

El camino no es nuevo. El MELFG ha realizado muestras, por ejemplo, para grupos de niños, jóvenes, administrativos de la Sede e incluso ha acudió a ferias y exposiciones de divulgación de la Universidad y de municipios alejados. De acuerdo con la profesora, le han apostado a flexibilizarse y adaptarse a diferentes públicos, porque los intereses, las necesidades y las potencialidades son particulares.

Adicionalmente, con la creación de la Red Cultural de la UNAL Medellín se estableció un nodo llamado Museos, colecciones y espacios expositivos, que busca apoyarlos y divulgar su información a través de exposiciones “Entre arte y ciencia”, creada recientemente, que ha permitido la participación en la Mesa de Museos de Antioquia y trabajar de manera conjunta con entidades como el Parque Explora.

Un trabajo interesante que ha hecho el MELFG, menciona la docente, es la macrofotografía. En ese formato han encontrado una posibilidad para dar a conocer colecciones limitadas a los investigadores como lo es la denominada Tipos, que guarda especímenes sumamente valiosos, porque fueron la base para la descripción de nuevas especies. Si bien estas muestras no eran accesibles para el público general, ahora se pueden observar en el sitio web del Museo y en sus redes sociales, donde “se puede apreciar su belleza, pero también entender su valor”. Con ese propósito se ha procurado por imágenes tridimensionales en las que se ven detalles de las características y las etiquetas.

En los últimos años en Colombia se ha ido sistematizando y digitalizando una parte importante de las colecciones, lo cual es también un aporte al conocimiento y divulgación sobre de la diversidad de insectos. Los datos se van publicando en el Sistema de Información Biológica (SIB), un sistema en línea para conocer y documentar la información biológica y de las especies que está conectado con bases internacionales facilitando el intercambio de información. Las imágenes de macrofotografía del MELFG son un gran aporte en este sentido.

Para que el Museo Entomológico fuera reconocido como centro de ciencia fue necesario realizar un proceso de autoevaluación y recibir visitas de inspección por parte de Minciencias.

Oportunidades que abre el reconocimiento

Para la docente Uribe Soto el MELFG ha sido reconocido como uno dedicado a la ciencia y a la investigación, al punto que ha sido fuente de consulta. “Convertirnos en centro de ciencia permite, de alguna manera, reforzar la función que tenemos y avanzar para visibilizarnos más, para que se valoren y apoyen desde lo económico y lo misional las colecciones como un patrimonio biológico y cultural, y para que estas se fortalezcan”.

El reconocimiento también permite más posibilidades en la participación de convocatorias para acceder a recursos, de relacionamiento o capacitación con entidades como el Instituto Alexander von Humboldt, o incluso con entidades a nivel internacional. Adicionalmente, para explorar formatos distintos a reuniones, talleres o publicaciones. Ahora, afirma la profesora, se les pueden sumar, por ejemplo, el uso de redes sociales, la realización de podcast o de exposiciones itinerantes que han sido opciones “un poco más ajenas que abren nuevas posibilidades de aprender y de compartir”.

Como integrante de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales (Accefyn) la profesora Uribe Soto menciona que se bsuca liderar y formalizar una actividad denominada Los niños vienen a la U, que ha desarrollado el Museo durante varios años, pues considera que hay una necesidad de educacar en temas de conservación ambiental y cuidado de los ecosistemas. Ese es precisamente uno de los propósitos a los que le apunta el ahora centro de ciencias de la UNAL Medellín para aportar a la sociedad.

(FIN/KGG)

16 de agosto de 2022