Fueron 92 empleados de la Sede los que recibieron el escudo que reconoce su labor administrativa desde los 10 hasta los 45 años, tiempo en el que cada uno ha aportado a la construcción de la Universidad como proyecto cultural, científico y colectivo de Nación.

Las distinciones corresponden al año 2021, en el que por motivos de pandemia no se pudo realizar la ceremonia presencial, sin embargo, el tiempo no fue excusa para exaltar el trabajo y compromiso de los empleados, que orgullosos recibieron su escudo en el auditorio Gerardo Molina del campus El Volador.

“Son muchos años de sus vidas profesionales y personales al servicio de este proyecto que es de todos los colombianos, La Universidad no funcionaría sin los administrativos por lo que en nombre de toda la comunidad universitaria les expreso un mensaje de respeto, admiración y agradecimiento por sus madrugadas, esfuerzo y compromiso, atendiendo con disposición los proyectos universitarios, aceptándolos con alegría y pasión. Gracias por encontrar en la UNAL Medellín un espacio para construir y defender el conocimiento público”, dijo Juan Camilo Restrepo Gutiérrez, vicerrector de Sede.

Para los homenajeados, esta ceremonia es la oportunidad perfecta para recordar su trasegar por la Universidad, destacando las enseñanzas y retos que trae el día a día en la Institución. Estas son algunas historias de los empleados distinguidos:

10 años de servicio: Laura Johana Giraldo Santacoloma

Es oriunda de Anselma, Caldas y actualmente se desempeña como profesional especializada de la Unidad de Gestión Ambiental, su llegada a la UNAL se remonta al año 1998 donde empezó sus estudios de Ingeniería Química en la Sede Manizales, allí se enamoró de la Universidad, y desde ese día no ha dejado de amarla.

“Cuando terminé mi pregrado continué con una especialización y fui docente de cátedra, luego entré como contratista al laboratorio de química donde estuve por cuatro años, finalmente me presenté a una convocatoria abierta de vinculación a la Sede Medellín y quedé, lo que me dio una alegría inmensa pues siempre había querido vivir en la ciudad y que mejor manera que hacerlo de la mano de la Universidad que tanto he amado desde muy joven”, comentó Laura Giraldo.

Para Laura su estadía en la Sede se hace más amena gracias a que disfruta inmensamente de la naturaleza de sus campus, sobretodo de la colección Arboretum y Palmetum León Morales Soto, que la inspira y la calma en los momentos de estrés laboral.

“Siempre me ha movido el compromiso y el cariño que le tengo a la Institución, queriéndola ver bien, con una eficiencia en nuestro trabajo, aportando a la calidad académica y la gestión como funcionarios administrativos, esto ha sido un aporte que considero importante durante mi labor en la Sede, pues somos personas comprometidas y todo lo hacemos con la mejor disposición y ánimo”, aseguró Giraldo Santacoloma.

20 años de servicio: Anny Derly Jaraba Gómez

Reconocida entre sus compañeros como una de las más alegres y espontáneas, Anny ingresó a la Sede como auxiliar administrativa en la Oficina de Importaciones, luego de profesionalizarse pasó a ser asistente de contratación en el nivel central, y posterior a su especialización y hasta la actualidad ocupa el cargo de jefe de la gestión administrativa de la Facultad de Arquitectura.

“Yo siempre he manifestado que he sido muy afortunada en haber llegado a esta Institución, por las personas, el trabajo, el espacio, cada día estoy más enamorada de la Universidad. Además, disfruto mucho de sus espacios, la naturaleza, el gimnasio, las cafeterías, en cada uno he construido recuerdos muy bellos”, dijo Anny Jaraba.

Siempre risueña y dispuesta a sacar una sonrisa, Anny ha sido testigo de cómo la Universidad cambia la vida de sus trabajadores, “lo primero que hago cuando una persona ingresa a trabajar a la universidad es decirle que estar aquí es una bendición, que se sienta orgulloso de pertenecer a la mejor universidad del país”, comentó.

30 años de servicio: María Eugenia Álvarez Álvarez

De los 30 años que María ha laborado en la Sede, 21 años ha sido en el Departamento de Producción Animal de la Facultad de Ciencias Agrarias, lo que la ha convertido en una mujer apasionada no solo por su labor administrativa sino por la naturaleza y los animales.

“La Universidad ha sido mi vida, ingresé a los 25 años, me casé, tuve a mis hijos en la Escuela UNAL, y he sido muy feliz en toda mi estadía, una época muy bonita y significativa”, aseguró Álvarez Álvarez.

Sus primeros cargos también fueron en la Facultad de Ciencias Agrarias, inicialmente en la Secretaría Académica y luego en el Departamento de Ingeniería Agrícola. “Durante estos años ha cambiado mucho el perfil profesional de nosotras las secretarias, al principio éramos muy pendientes de la mecanografía, las actas, y los exámenes, ahora la tecnología nos ha ayudado a potenciar nuestro trabajo, agilizando los procesos para seguir siendo un apoyo fundamental a los docentes”, dijo.

María Eugenia espera jubilarse el próximo año, pues considera importante darle paso a las nuevas generaciones, “espero que quienes ingresen a la Universidad como empleados aprendan su labor con amor y entusiasmo, que la vida laboral aquí es muy buena y hay que aprovechar la oportunidad que nos da la vida, yo particularmente nunca he estado aburrida ni un solo minuto en la UNAL Medellín”, comentó.

40 años de servicio: Darío Alberto Ibarra

Darío, uno de los más aplaudidos en la entrega de escudos, es administrador de empresas, especialista en gestión humana y productividad. Actualmente es empleado de la Unidad de Gestión Administrativa y de Servicios de la Dirección de Servicios Compartidos.

Cuando ingresó a la Universidad el contrato era inicialmente de un año como auxiliar administrativo, al finalizar este tiempo tuvo la oportunidad de vincularse definitivamente en el mismo cargo, y a medida que iba profesionalizándose escaló a otros puestos, lo que lo hace ser un hombre integral y gran conocedor de las dinámicas de la Sede.

“Esta es una gran Institución donde uno como empleado puede estudiar y formarse académicamente. En la Universidad uno aprende desde el primer día que llega hasta el último que se va, porque está rodeado de muchas personas que buscan el conocimiento y el aprendizaje y que no tienen miedo a compartirlo, generando una confianza y una comodidad que difícilmente pueda encontrar en otro lugar”, afirmó Ibarra.

En este evento también se entregaron los reconocimientos que el Consejo Superior Universitario otorgó mediante ceremonia en 2021 a los funcionarios que se destacaron por su desempeño laboral sobresaliente y sentido de pertenencia por la Universidad. Ana Silvia Arboleda recibió la Medalla Alejandro López y los empleados Lady Bibiana Uribe, Edwin Alejandro Hinestroza y Otoniel de Jesús Ciro, recibieron menciones honoríficas.

El evento finalizó con la presentación del grupo artístico Ensamble UNAL, que deleitó a los asistentes con sonidos que rescatan nuestras riquezas culturales. 

Como un homenaje a los funcionarios destacados, se comparte la galería fotográfica del evento: ingresar aquí

(FIN/DQH)

2 de marzo de 2022