Esta exposición estará hasta finales de año en la Sala del Hombre de la Biblioteca Efe Gómez, y pretende mostrar el proceso de mantenimiento de la colección patrimonial de la sala Tulio Ospina Vásquez, que contiene libros, revistas y tesis desde 1815.
El proyecto hace parte de la inversión que realizó la Sede para la restauración de la Biblioteca Hernán Garcés González de la Facultad de Minas, que incluye su sala patrimonial, y así hacer un homenaje a la gran riqueza documental con la que cuenta la UNAL.
“Buscamos que el visitante se encuentre con el material y pueda ver como las huellas, el tiempo, el uso y el deterioro hacen mella sobre esas publicaciones; y así evidenciar cuáles son las marcas que tienen, que van desde sellos hasta notas al pie, pues muchos de esos libros hicieron parte de las bibliotecas personales de profesores que las donaron a la Universidad, y han acompañado a generaciones de estudiantes, siendo parte de la memoria científica y técnica de la Institución”, asegura Jaime Alberto Gómez Espinosa, coordinador del proyecto de Salas Patrimoniales de la División de Bibliotecas de la Sede.
La exposición contiene 10 paneles donde se hace una reflexión en torno a la colección patrimonial, con cuadros estadísticos para mostrar por años cuantas tesis se hacían en la Facultad, y sus temáticas, entre las que se encuentran: explosivos, estructuras, pavimentos, administración, aguas, edificios, ferrocarriles, puentes, instalaciones sanitarias, entre otros.
En ese sentido, la muestra también incluye imágenes que dan una idea de cómo se hacían las tesis, pues en ese momento no había herramientas tecnológicas ni gráficas, por lo que casi todas son mecanoescritas, los planos y esquemas son hechos a mano.
“Queremos invitar a toda la comunidad universitaria que está ingresando al Campus El Volador a que se acerque a la biblioteca y se contagie de este asunto del patrimonio, que hace parte de la identidad de nuestra Institución. Es una experiencia de redescubrimiento que les da a estas publicaciones el lugar que merecen, tanto para la conservación como para la consulta y difusión”, concluye Jaime Alberto Gómez Espinosa.
(FIN/DQH)
26 de octubre del 2021