Escudo de la Repblica de Colombia Escudo de la Repblica de Colombia
A- A A+

Este comité instaurado por la Gobernación de Antioquia espera hacerle frente a la condición de emergencia climática que vive el departamento desde el conocimiento científico y la articulación política. 

  • Siete de los 14 miembros del Comité Científico de Emergencia Climática en Antioquia tienen un vínculo con la UNAL Medellín. Cortesía: Gobernación de Antioquia.

    Siete de los 14 miembros del Comité Científico de Emergencia Climática en Antioquia tienen un vínculo con la UNAL Medellín. Cortesía: Gobernación de Antioquia.

  • En la tercera sesión del Comité Científico de Emergencia Climática se discutió sobre desarrollo urbano resiliente. Foto: Reproducción.

    En la tercera sesión del Comité Científico de Emergencia Climática se discutió sobre desarrollo urbano resiliente. Foto: Reproducción.

  • Desde el Comité se estará organizando un diplomado virtual de Emergencia climática para periodistas, que comienza la segunda semana de abril. Foto: Pixabay.

    Desde el Comité se estará organizando un diplomado virtual de Emergencia climática para periodistas, que comienza la segunda semana de abril. Foto: Pixabay.

    De los 14 miembros que componen el Comité, siete tienen un vínculo con la UNAL Medellín: los profesores Yuley Cardona y Germán Poveda del Departamento de Geociencias y Medio Ambiente de la Facultad de Minas, y Rolando Barahona de la Facultad de Ciencias Agrarias; además de los egresados Paola Andrea Arias, Azucena Restrepo, Sara Cristina Vieira y Santiago Ortega. 

    En la tercera sesión del Comité Científico de Emergencia Climática se discutió sobre desarrollo urbano resiliente, tema de gran importancia en países como Colombia, que está urbanizado casi en un 80% según cifras de la Gobernación de Antioquia. En esta línea se propusieron seis temas de análisis: 

    •   Construcción resistente al cambio climático.
    •   Sistemas urbanos de drenaje sostenible.
    •   Infraestructura para la movilidad sostenible y sistemas de transporte público.
    •   Aprovechamiento integral de residuos sólidos.
    •   Rellenos sanitarios bajos en carbono.
    •   Puertos marítimos y ribereños sostenibles.

    Rellenos sanitarios ¿deberían dejar de existir? 

    Para Santiago Ortega, ingeniero civil y magister en Recursos Hidráulicos, sí. “El tema de los rellenos sanitarios sirvió para algo en su momento, pero hoy deberíamos trascender, ya que genera desaprovechamiento del suelo urbano, emisión de gases de efecto invernadero y contaminación de agua. Enterrar basura, es básicamente enterrar plata, pues lo que se descompone, no se puede reutilizar en estrategias de economía circular”. 

    Para lograr esta meta, Ortega asegura que el trabajo tendría que ser paulatino, con miras a 20 años, y construir un esquema general de reaprovechamiento y reciclable que lleve a un posterior uso energético de los residuos y al final llevar al relleno sanitario lo que sea inerte, residuos de construcción que no se puedan emplear para nada más. 

    “Una de las propuestas sería desincentivar que se boten los residuos a la basura, pero por medio de un tema tributario que castigue esto o un acuerdo con la industria que encarezca su costo.  Cuando hay una señal económica al final de la cadena todos los agentes que están antes responden”, afirma Santiago Ortega. 

    Manejo del agua y recuperación del fósforo 

    Para el profesor de la Facultad de Ciencias Agrarias, Rolando Barahona, la ciudad debe reconocer que depende de muchos recursos del entorno que la rodean, en particular del agua, por lo que “creemos que se debe proponer un programa donde los usuarios de las ciudades promuevan el uso adecuado de los recursos entre aquellas comunidades que tienen el primer impacto sobre la cantidad y la calidad de la fuente hídrica: los agricultores y los ganaderos”. 

    Otro tema de discusión fue el qué se está haciendo para recuperar el fósforo, mineral indispensable para la vida humana. El tema es importante para el desarrollo urbano pues las ciudades son las principales receptoras de todo este material que se mueve por el sistema planetario. 

    “El 97% del fósforo que usamos viene de la ganadería y la agricultura, y llega a nosotros por medio de los alimentos que consumimos, prácticamente el 100% de este material no lo retenemos, sino que llega a las aguas negras. ¿Qué está haciendo la ciudad para recuperarlo? Recordando que este recurso viene de las minas, y muy pronto no lo tendremos disponible”, afirma Rolando Barahona. 

    El factor social, clave en la crisis ambiental 

    Cuando se habla de naturaleza y crisis medio ambiental, el ser humano se aleja de estas categorías, pensando que su función social no está involucrada, pero es ahí donde puede estar la clave de un verdadero cambio. 

    Según Paola Andrea Arias, ingeniera civil y magister en Recursos Hidráulicos, hay que tener una visión sistémica de todo el asunto medioambiental, pues “el componente social es fundamental, y cuando pensamos en focos de desarrollo como la zona de Urabá vemos amplias desigualdades en la región, con los impactos del cambio climático, la erosión costera por el ascenso del nivel del mar se asocia a la vulnerabilidad de estas poblaciones. El ámbito sociológico en lo ambiental no es algo secundario, es mucho más profundo y debe traerse a estas reflexiones”.  

    Otros de los temas tratados en esta tercera sesión del Comité apuntaban al mejoramiento de la articulación entre instituciones que trabajan en pro del medio ambiente, así como la implementación de infraestructuras dignas que sean resilientes con el entorno y el fomento del uso de la bicicleta como alternativa de movilidad. 

    Tras finalizar la tercera sesión del Comité Científico de Emergencia Climática, sus miembros y delegados del gobierno nacional y departamental se comprometieron a abrir en sus agendas un espacio de mayor análisis, discusión y revisión de los temas sugeridos, con el fin de llevar al departamento a un futuro ambientalmente más viable. 

    (FIN/DQH)

    11 de marzo del 2021