En estos días, próximamente estoy cumpliendo 100 años, ahora en mayo. Yo me gradué aquí hace 75 años, de la Escuela de Minas de la Universidad Nacional de Colombia. Caminé mucho, más de 50 años estuve haciendo ejercicio caminando debido al trabajo de campo. Estuve casado 67 años porque hace cinco que enviudé, para mí la familia ha sido lo máximo. Uno no tiene que ufanarse de sus logros porque esas son cosas humanas que pasan y se olvidan. Uno extraña una cosa muy importante y son los compañeros.

Estas ideas constituyen un extracto del pensamiento del ingeniero civil  Lucio Chiquito Caicedo, ilustre egresado de la Facultad de Minas de la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín y uno de los personajes más influyentes de la ingeniería en el país durante el siglo XX. Consciente de los aportes de Chiquito al desarrollo, la Vicerrectoría de Sede de la U.N. Medellín y la Facultad de Minas le otorgaron conjuntamente una moción de exaltación y reconocimiento por su labor académica e investigativa.

“Hace más o menos dos meses el profesor Chiquito vino a la Universidad y nos dijo: ‘lo último que yo quiero hacer en la vida es darle un tributo de gratitud a la Universidad Nacional de Colombia, yo hice una investigación de la cual saqué un artículo científico en una revista inglesa y quiero dar un curso presentando esos resultados para que los estudiantes y profesionales los conozcan’. Así que nosotros dispusimos lo necesario para que el profesor dictará sus lecciones y quisimos también corresponderle el gesto porque tenemos mucho que agradecerle”, contó el profesor Óscar Mesa, de la Facultad de Minas.

Para el profesor Mesa, gracias a su trayectoria y aportes, el ingeniero Chiquito Caicedo pude ser considerado uno de los padres de la ingeniería en Antioquia y en Colombia. De hecho Lucio Chiquito fue uno de los fundadores de tres importantes compañías: EPM, SEDIC S.A. e Integral S.A. además de la Escuela de Ingeniería de Antioquia.  

Tras algunos años lejos de las aulas de clase y de la dinámica empresarial, gracias a su amor por la investigación, la academia y la ingeniería, Chiquito Caicedo regresó a la U.N. para dictar un curso sobre determinación del punto óptimo de la curva de regulación de ríos y duración de caudales. “En estos días, próximamente estoy cumpliendo 100 años, ahora en mayo. Entonces dije, bueno, yo tengo algo nuevo y quiero ofrecerlo para que otros lo conozcan y acá me aceptaron. Volver a la Universidad es algo muy bonito porque yo francamente no había pensado que fuera posible”, confesó Chiquito.

El vicerrector de la Sede, John Willian Branch Bedoya, y el decano de la Facultad de Minas, Pedro Nel Benjumea, aprovecharon la última lección del profesor Chiquito para entregarle la moción de exaltación y reconocimiento.

“Es motivo de orgullo para la Universidad Nacional de Colombia Sede Medellín contar con un egresado como el doctor Chiquito Caicedo que ha contribuido al desarrollo de la ciudad a través de sus invaluables aportes como ingeniero y que con su trabajo incansable en la formación de profesionales íntegros e idóneos representó gran contribución al desarrollo científico y social de la región”, dijo el Vicerrector, quien además le agradeció a Chiquito el compromiso con su alma mater.

Agradecido por el reconocimiento, el ingeniero, que aun con casi un siglo de vida conserva lúcida su mente, señaló que no le gusta ufanarse de sus logros porque esas son cosas humanas que pasan y se olvidan: “ya dentro de un tiempo nadie se acordará del túnel de la quiebra, por ejemplo, incluso ahora muy pocos saben todo el esfuerzo gigantesco de la construcción del Ferrocarril de Antioquia y de tantas cosas que hemos hecho”, dijo.

Finalmente el profesor Lucio Chiquito Caicedo agradeció a la U.N. por abrirle las puertas del saber, a su familia por apoyarlo siempre, a los amigos que nunca lo han dejado solo y a los compañeros de camino que ya partieron, a quienes extraña tremendamente. 

6 de abril del 2016