Con base en las diferentes estancias que configuran el Parque de los Deseos, uno de los espacios referentes de Medellín, dos estudiantes de Arquitectura de la U.N. analizaron el grado de apropiación de los espacios públicos de la ciudad.
Alejandra Zapata Giraldo, de noveno semestre, y Johanna Peña, de octavo, analizaron cómo ciertas estancias responden a los retos climáticos propios del trópico: calor extremo, lluvias frecuentes, días nublados y sobre todo variaciones impredecibles de clima; y cómo, con base en ello, podría hablarse de mayor apropiación del espacio público por parte de la ciudadanía.
“Nosotros consideramos estancias como un conjunto de elementos que tienen una superficie, un mobiliario y una cobertura, que generan un sistema y se muestran como una unidad dentro del Parque”, señaló Johanna Peña.
En el lugar las investigadoras realizaron mediciones de temperatura de globo en diferentes días y momentos lo cual les permitió cruzar variables como temperatura, humedad y emisividad de los materiales, entre otras que analizaron a la luz de las percepciones de los usuarios para identificar el rango de eficiencia de cada una de las estancias.
“Las observaciones en relación con el comportamiento de los visitantes excluyeron la permanencia por eventos y actividades programadas porque queríamos que fuera permanencia y apropiación espontánea, es decir, que tuviera que ver con el simple deseo de estar y gozar el espacio”, explicó Alejandra Zapata.
En cuanto a los hallazgos las estudiantes encontraron que el Parque de los Deseos tiene como vecinos a estudiantes y empleados de oficina. A propósito, indicó Zapata, que el lugar no mostró una estancia que, apartando las condiciones térmicas, fuera capaz de brindar condiciones de diseño para largas permanencias de un estudiante, por ejemplo.
“Así las cosas, empezamos a ver que para las personas la apropiación la da, en primer lugar, la condición térmica, es decir, prefieren no tener calor que estar cómodas; pero cuando esta desaparece, porque consideramos también días nublados como condición propia del trópico, la ergonomía es el factor predominante, y este aspecto es una gran limitante”, dijo la joven.
Según las investigadoras el Parque de los Deseos es un lugar propicio para permanencias cortas, condición que se ajusta al grueso de los espacios públicos de la ciudad.
“En cuanto al diseño de los espacios públicos de Medellín nosotras creemos que no se ha tenido en cuenta que las cosas son un conjunto y que no sirve una silla sola, un arenero solo, un espejo de agua solo, para que la gente encuentre esa apropiación y esa comodidad necesaria, aunque hay que reconocer que se ha hecho el esfuerzo grande por estos lugares”, acotó finalmente Alejandra Zapata.
La investigación, que fue presentada en el marco de la sexta jornada de socialización de trabajos realizados por el Grupo de Investigación en energía, Medio Ambiente, Arquitectura y Tecnología EMAT), se extenderá a los municipios de Santa Fe de Antioquia y El retiro.
(FIN/CST)
17 de junio del 2016